No hemos de comprenderlas

Este será mi primer post para un blog personal en lo que llevo de paso en este mundo, y me pregunto: ¿Por qué comencé con este tema tan difícil? Debí haber comenzado con ese anterior que hice y que no verá la luz hasta que sea necesario (Un post que trataba sobre un servidor pero que borré cuando iba por la mitad porque me sentí muy ególatra… digo, ¿hablar de ti en tu primer post?). Pero hace unos minutos, hablé con unas amigas, vi que una relación con otra amiga no iba del todo bien y con otra va en ascenso, y que una tipa de 29 años me agregó al Messenger, y ni siquiera la conozco. Todos esos casos, relacionados a Mujeres.

Aceptémoslo, lectores masculinos, las mujeres son otro rollo y muchos de ustedes lo habrán experimentado alguna vez en sus vidas;  hasta la fecha me siento atrapado por la complejidad que ellas guardan bajo tanta belleza y dulzura. He conocido a muchas mujeres, y todas ellas han obtenido (en mi subjetiva mente) algo que me gusta de ellas: Espontaneidad, cultura, conocimientos, gustos musicales, sus ojos, su piel, sus labios, su rostro, su cabello, sus pechos, su forma (del cuerpo), en fin,  que cada una trae algo agradable consigo.

No estoy seguro si Dios las creó así, pero qué bien las hizo… Son Bonitas, aguantan dolores inmensos (Dar a luz, ser ama de casa, criar niños, no ha de ser fácil) y sobre todo, uno se siente bien estando con ellas lo cual es guajiro; y cuando estás con la indicada es como si partes complementarias se unieran en una fusión de unidades… en donde 1+1= 1

Yo me he enamorado de mujeres, como creo que a muchos les pasa, pero no he sido bien correspondido. Siempre hay un detalle que me impide concretar algo con esa chica que fue especial en su tiempo, pero hoy lo sigue siendo; sí, si una chica me gustó, pero no me correspondió no le tiro la puerta en la cara, simplemente la acepto como amiga y no le guardo rencor. No siempre se devuelven los E-mails en los Reenvíos del Amor.

He estado con muchas damiselas, y admito que hasta recientes fechas no había decidido cómo realmente me gustaban. Preferentemente de piel clara, con cabello oscuro, si se puede con ojos claros y expresivos, con manos delicadas y unas uñas perfectas; además de lo físico preferiría si fuesen cultas, para poder hablar de algo siempre, y si les gusta el Metal estarían para casarme ahí mismo. Hasta la fecha, no he encontrado a una con todas esas características, pero seguro anda en el mundo vagando una damisela en busca de un hombre como lo es su querido redactor ¿o acaso encontraré a la mujer perfecta para mí en un modelo alejado de lo que yo creo esencial?

Se supone que con cada mujer con la que intento algo, debo aprender algo,  pero NO es así. Permítanme explicarles el por qué:

“Las mujeres, vago amigo, son como los dulces…  existen miles de ellos, de distinta forma, tamaño, procedencia, color, olor, sabor, en fin, las posibilidades son infinitas”

Y lo que puedo aprender con una mujer, difícilmente lo aplico con otra, pues entre ellas mismas varían mucho.

Son únicas, son bellas, son Mujeres.

P.D: Si eres una chica, siéntete afortunada de serlo, pues aparte de ser como un Dulce, eres Arte en toda la expresión. Las Mujeres son Arte que se mueve, que respira, que existe, que es, fue y será, que vive las emociones y principalmente, arte del que no te puedes alejar.

Actualización: Ya tengo a una bella damisela en mi cuidado. Y cumplió con muchos de los detalles que les planteé en el quinto párrafo. ¡Yeah! Me siento tan afortunado de encontrar a una persona que me quizo en los primeros instantes, tanto como yo a ella.

Nosce Te Ipsum.