Sueño Contigo

Tengo una invitación hermosa
de mi única, hermosa gran diosa
a  noche de muerte y resurrección
al lado de la mismísima perfección

Yo sé que ella me ama
me ofreció ya su cama
no para placer mundano dirigir
es sólo noble deseo de dormir

Viviré el privado, nocturno momento
de sus límpidas sábanas y almohadas
 y a estas horas preciadas, le llamarás
el hermoso eterno, de sueño lento

Pero no profanaré la belleza
de una diosa, que ya bosteza
hemos llegado aquí a dormir
no a meros actos carnales vivir

El viento de la ventana susurra cuentos
pero están acompañados de frío
y querida, temo meterme en un lío
por favor abráceme dulce y lento

Destaca lo denso que es el aliento
que exhalan sus cálidos pulmones
igualmente esos besos que pones
con mucho amor, en mi elemento

Unidos sólo por nuestras extremidades
entramos juntos al reino del sueño
en donde todo es delicado, pequeño
que no por eso no mata ansiedades

Un brazo que nos mantiene unidos
una mano que acaricia, sin gemidos
unos labios que exhalan una interna paz
y miradas que no mirarán de más

La blanca cama ahora es recipiente
de este, su deseo y sueño suficiente
que está en un cuerpo, dividido en par
las fronteras son cosa de tierra y mar

Puesto que tu calor me mantiene vivo
y del frío dolor no puedo vivir esquivo
tú eres mi paz, sólo tu viva presencia
calmará en mí alma toda dolencia

Abrázame y no me dejes de abrazar
que las traviesas olas de noche
me llevarán con mucho reproche
a un mundo lleno de confusión y azar

Y qué peor que perdido sin ti
en la negra oscuridad, no resistí
y lacerado crudamente caí

Levántame y dame de tu calor
de esa tu esencia, de tu dulzor
me salvará siempre tu amor

Me he de despertar, levantar
y abrazarte fuerte sin parar
para el sueño poder reanudar

No hablaremos más, cariño
dejo mis preguntas de niño
pues nosotros dormiremos

En el sueño de paz bailaremos:
“un minueto en época estival
tú y yo en negrura invernal”

Y verás que no soy tan mal bailarín
que puedo moverme a tres compases
pero me moveré en mil brebajes
nacientes de tus besos sin fin

Luego, tendremos una merienda
en campo abierto, sin suelta rienda
entre nosotros , que daremos caricias
y muchas cosas son menú de delicias…

Y sólo el silencio será el testigo
de que aquí no habrá algún libido
sólo el revelador silencio de felicidad
de un pareja que se duerme en verdad

Me acurruco,  ya rendido
sobre un ángel, una estrella
sobre ti que eres la más bella

A vuestro cuerpo voy dormido
en aras de la noche perfecta
pues sólo a nosotros respecta