Un Gran Día

Esto lo comencé a escribir ayer, pero sólo hasta hoy lo pude concluir. Espero que la entrada te sea harto interesante y si gustas, puedes dejar tu Comment. Comenzamos:

Hasta donde llevo del día de hoy, todo ha salido de excelente manera. Tantas cosas que pasaron hoy y que difícilmente se repitan en un buen tiempo.

Por ejemplo, hoy fue el Último Día de Clases de mi Plantel Educativo, y coincidentalmente hoy le tocó el homenaje a salón (que aunque no lo hizo bien, es algo importante que recalcar, ¿no?); también hoy nos dieron algunas clases libres puesto que ya habíamos acabado los temas pendientes del curso y todo el mundo estaba en ese estado que todos conocemos como "Hueva" y en lo particular me gustó la clase de Computación, ¿recuerdan al Suspiro por los Viejos Tiempos?

Digamos que hoy pasó algo similar... pero en una humilde sala de 16 jugadores jugando en la Red del Salón en un aquelarre de asesinos armados con armas clásicas de Halo Combat Evolved.
Y ya se imaginaran que si jugar con una pareja de jugadores es bueno, con 16 cabrones intentando sodomizarte con una buena cucharada de plasma y plomo, bueno… fue una experiencia Épica.
Y eso, se repitió igual en otra materia en la que se suponía veríamos una película, pero como el equipo de video falló, se nos permitió jugar en las computadoras por segunda ocasión, reviviendo así los buenos momentos de unión grupal entre soeces, mentadas de madres y maldiciones, claro.

Además hoy ya quedaron definitivas las materias que exentaré y sólo debo de ir pocas veces a mi Plantel para entregar/decir cosas realmente vagas y sin mucho esfuerzo de mi parte, pues ya he adelantado un poco de las mismas: Una exposición de Inglés, un dibujo para artísticas y recoger unos documentos necesarios para mi reinscripción. Sólo por ello he de ir a “clases”.

También estuve ambos recreos con mi adoradísima Dama, Engel [inserte suspiro de poeta aquí] pasando buenos e interesantes momentos hablando de nuestra relación para esos momentos especiales que pocas veces se dan y con los que mucho soñamos para intentar, en pocas palabras pusimos unos límites y unas cuantas reglas para tratar de no pasarnos de la raya en nuestra emergente relación (aún llevamos el primer mes y un poco más de la mitad)
En la penúltima hora pasó algo similar. Sólo que en esta ocasión ella salió de su salón porque no hacían algo en clases y se fue al mío, en donde yo tampoco hacía mucho. Y así estuvimos, un buen rato, tentándonos el uno al otro en ese juego de pasión, de flirteo, de sonrisas que esconden algo más que palabras, y roces que buscan algo más que acciones. Hubo un momento que realmente me gustó mucho: Tomé una guitarra que un compañero había llevado y empecé a tocar cierta canción especial que estoy componiendo a mi bella novia. Aunque estaba incompleta, tal parece que le gustó muchísimo y después de dar ese último acorde de E menor nos quedamos abrazados, en una paz corporal tan bonita y estando en sintonía con el otro, pudimos escuchar cómo nuestras almas se querían unir en algo más que una mera fusión de elementos. Luego, tuvimos que despertar y regresar a nuestro vago mundo.

Y en cuanto a la escuela de tarde, la siguiente semana es de exámenes instrumentales (en mi caso, de violín) y debo prepararme adecuadamente para poder pasar con 10 los mismos. Estudio diario de mi pieza con variaciones de ritmos, cuidado de mi buena pero mejorable técnica y solfeo memorizado de la pieza en sí para garantizar que saldrá excelente.
El mismo día tengo igual el examen de Ensambles, en el que tocaré con un amigo violinista una pieza de un tal J. Mazas en G mayor y en 4/4 escrita para Dos violines, yo seré la segunda voz. También debo estudiar esa pieza e ir a casa de Frank para que quede chida-lira, y aunque ya nos sale muy bien sólo sería ir a su casa a pulir detalles de afinación (es una tremenda flatulencia en un instrumento de cuerda frotada) y detalles de la partitura un poco más teóricos.

Y en cuanto a Frank, le quisiera seguir agradeciendo por haberme podido trasladar de la escuela de música a casa de Quijote (un amigo que se parece al Ingenioso Hidalgo de Cervantes), pues se suponía que en ésta semana no habrían clases de violín pero ayer me salieron con una de improviso y no tuve más remedio que pedirle el gran favorsote a Frank. De nuevo, no sé si lo leas algún día, muchas gracias, Frank.

Pasando ya a casa de Quijote, pues llegué después de que pidieran la pizza y se atragantaran con ella. Ya cuando llegué estaban las retas de Halo: Reach en las que no tuve tanta suerte con el ya citado Halo: Combat Evolved, fue común en mi acabar en los últimos lugares y cederle el control al jugador en espera. Pero hubo un momento en el que quedé en 3° lugar y me sorprendí a mi mismo por el nivel que logré en un XBOX 360. También tuve la oportunidad de jugar el Playstation Move, en un Playstation 3 y bueno… definitivamente me quedo con el Wii, ya me acostumbré mucho a la compañía nipona de la gran N. ¡Ah! Y comí tacos que mandaron a pedir los papás de Quijote.

Y bueno y eso fue lo más relevante de mi día, un día un tanto diferente que llegó a romper con mi rutina para traerme muchas sorpresillas por aquí y por allá.

Cuéntame, ¿has tenido un día así súper excelente recientemente?

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