Folletos ecológicos

miércoles, 27 de abril de 2011

Libertad

Después de escuchar un poco a la naturaleza, apreciar el silencio que lo dice todo y disfrutar de algunos derivados alimenticios de un porcino ya “morido” llegué a la siguiente premisa:
“La Libertad plena sólo será alcanzada en la ausencia de la pluralidad de seres”
Esto, a vago modo, quiere decir que sólo estando solo puedes ejercer a plenitud vuestra libertad y libre albedrío.
Digamos que la presencia de seres iguales a ti limita tu rango de acciones, ya sea porque alguna acción será nada beneficiosa al prójimo o bien porque el prójimo tenga ideas contrarias a las tuyas, que limiten tus acciones; por ello es que se dice que “tu libertad termina en donde empieza la mía”
La sociedad “libre” en la que hoy vivimos se ha encargado de establecer ciertas normas o patrones que salvaguardan la integridad del otro, la dignidad y shalalá-shalalá* con ideas de no matar, no robar, no hacer daño, respetar ciertas cosas o personas, limitarse en hacer X o Y acciones, en fin… tú sabes a qué demonios me refiero.
Tu libertad se ver mermada por la gente que te rodea: Tus seres queridos y la sociedad (para no hacértela de choro) ya sea con opiniones que te hacen titubear o con literales prohibiciones. Podrás pensar que eso se hace para quitarnos algún posible sufrimiento o mal, y tienes razón… pero a la vez te están negando la posibilidad de la experiencia y eso… es una completa mentada de madre a tu libertad.
Será “libertinaje” mi concepción de la libertad, pero en ausencia de gente juiciosa, es libertad pura y plena. No dañarás ideales ajenos, no atentarás contra la libertad del otro, serás tu propio Dios y perecerás libre… como el viento que me compartió estas palabras.
Para finalizar, complementaré con el hecho de que es algo… eh… ¿curioso? Ver cómo la gente vende e intercambia su libertad a cambio de un la promesa de la seguridad, unas décadas más de esta idea y la pesadilla orwelliana se hará realidad… si no es que ya la vivimos.
Carpe Diem, Carpe Noctem, Carpe Vitam
*: Otra forma de decir “Etcétera”

2 comentarios:

  1. Muy cierto, la libertad está condenada, (maldita sociedad...), tiende a ser maleable y el ser humano siempre está dispuesto a pedir más de lo que se le puede dar, no se contenta como un simple pez en su pecera que es feliz en su libertad reducida.

    La libertad no existe como tal.

    Aún así, yo prefiero caminar bajo la lluvia :D...

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  2. Más que condenada, Rince colega, creo que está limitada. ¿Maleable dices? Bastante, según el contexto en el que te encuentres puede que tengas más o menos (hoy en día tenemos más libertades nosotros los jóvenes que hace 50 años)
    Pues sí, pedimos más... se nos ha enseñado que el conformismo es malo y no debemos consentirle.
    Pero aún existe gente muy simple que con una casa de adobe, una tabla de madera y sustento diario se la pasan de pocas pulgas.
    Existe algo llamado "Libertad" que no es libre, más bien está condicionada, muy condicionada.

    A mi me gusta tocar el violín :D

    ¡Saludos y buena vibra! n.n

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