Algún día...

Hoy escribiré sobre mi ideal futuro. Ese en donde pueda pasar mi vejez satisfactoriamente hasta llegar el último día y poder irme diciendo que tuve una buena vida, y desearía repetirla por los siglos de los siglos. Consideren que [literalmente] todo cambia, así que puede que dentro de un par de años no sea igual mi percepción.

·         Después de haber estudiado algo alusivo a ciencias de la salud [o quizá, sólo quizá, algo de humanidades] habría tenido mucho tiempo para ahorrar una considerable suma de dinero.

·         Después de tener al menos un hijo, máximo dos, me iría con toda la paz del mundo a un lugar más templado. Quizá algún punto perdido en los Estados Unidos de América o [mejor aún] en Europa. Específicamente Alemania[1]

·         Ese punto perdido debe de ser un pueblo. Más pueblo que mi actual pueblo. Algo sencillo, vida sencilla. No quiero vivir ostentosamente, ni mucho menos. Deseo despertar, ir a la plaza a pasar un momento hablando con viejos conocidos, contar experiencias y comprar algunas cosas, regresar a casa por algo de chocolate caliente y un buen libro.

·         Principalmente, y creo es mi punto angular, tocaré violín en mis últimos días. Por favor, a quien sea, debo tocar violín en mi vejez. No importa lo que pase, quiero no perder mis últimos sentimientos, anhelos, juventud y vida a lo tonto. Que se exprese mi vida en la belleza de mi sonido.

·         Quizá tener un perro, para no volverme enteramente loco [creo me volveré loco en algún punto, pero bueno…] Además, un colega para cuidar no me traerá ningún problema, y más aún una lengua tibia me caerá bien.

·         Dar clases de música, literatura o humanidades. Probablemente pueda transmitir mis conocimientos a la humanidad del futuro, no sé… sería lindo tener a alguien que quiera aprender algo de un viejo violinista culto. Además de que el contacto humano me alejará de la inminente demencia senil.

·         Libros, books & Büchen. Meterme a historias ajenas a veces fantásticas, a veces tan reales me mantendrá ocupado mentalmente. Me dijo un adulto mayor que estudia alemán conmigo que siempre es bueno mantener a las neuronas trabajando para que no se “pudran”. Él sabe ya como 4 idiomas y creo que irá por más.

·         Alejarme de la tecnología. Definitivamente, creo que sólo tener una laptop, teléfono y televisión es más que suficiente. Lo demás, es prescindible. Encontraré más paz en tocar música, leer un libro o hablar con gente en vivo que enterarme del último chisme ajeno, Dios mío.

·         Componer música, ponerla en papel y mandarla por correo electrónico a algún lugar para que la tengan guardada y en el futuro algún descendiente músico mío pueda decir que su ancestro compuso buenas rolas.

Carpe Diem, Carpe Noctem, Carpe Vitam.

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[1] Ich habe Kalt: Debo confesarles que soy muy adverso al frío. No me gusta para nada, pero creo me deberé acostumbrar para poder conservarme mejor en fríos climas [que simulen un frigorífico] a climas cálidos [que me cocinarían lentamente]